La educación que damos a nuestros niños durante los primeros años de su vida es fundamental para su desarrollo.
En la escuela infantil del Colegio Bristol creemos firmemente que iniciar cuanto antes a los niños en el aprendizaje de idiomas es beneficioso en todos los aspectos, además de necesario, sobre todo teniendo en cuenta que vivimos en un mundo cada vez más globalizado.
Los niños entre 1 y 3 años son auténticas esponjas, por lo que son capaces de asimilar nuevas palabras sin que ello suponga ningún inconveniente a nivel de habla o del lenguaje.
Existen falsas creencias sobre la introducción de un segundo idioma en la primera infancia. Sin embargo, lo cierto es que cuanto antes empiecen a tener contacto con otras lenguas, el aprendizaje será mucho más natural, como cuando se aprende la lengua materna.
3 mitos y realidades sobre el bilingüismo en guarderías
Seguramente habrás leído o escuchado muchas cosas acerca de introducir el bilingüismo en bebés y niños menores de 3 años. Aquí vamos a desmontar algunos de esos mitos más repetidos y que no tienen ninguna base sólida sobre la que apoyarse.
Vamos allá:
1.- La enseñanza de 2 idiomas de forma simultánea puede provocar retrasos en el desarrollo del habla de mi hijo.
MITO. La realidad es que, por lo general, todos los bebés empiezan a decir sus primeras palabras sueltas (mamá, papá, agua, galleta…) alrededor del año de edad. Este logro del desarrollo del pre-lenguaje es el mismo en todos los idiomas. Sobre los 2 años los niños empiezan a juntar algunas palabras como, por ejemplo, mi chupete, mi mamá, ya está. Esta media es la misma para niños expuesto a uno o varios idiomas, por tanto, esta pregunta es un mito. Lo que sí es cierto que puede pasar, es que el bebé mezcle ambos idiomas, pero esto no supone un problema para el niño, en todo caso para el receptor que deberá hacer un mayor esfuerzo por entenderle, pero en ningún caso es síntoma de un desarrollo anómalo del bebé.
2.- Iniciar a los bebés en el bilingüismo en la escuela infantil repercutirá negativamente a nivel académico en las siguientes etapas educativas.
MITO. Totalmente falso. Durante los primeros años de vida el desarrollo cerebral es más rápido, lo que favorece la interiorización de un nuevo idioma. Por eso, cuanto antes empiecen a familiarizarse con el segundo idioma, mejor y más fácil lo van a aprender y, por tanto, lo van a saber manejar. Al final, aprender un idioma no deja de ser una destreza más del niño que se consigue a base de repetición y práctica. La misma forma en la que aprendemos nuestra lengua nativa.
3.- Exponer al niño a un segundo idioma es suficiente para su aprendizaje
¡Ojalá fuera todo tan sencillo, pero…desgraciadamente, no! Esto también es un mito.
Aprender un idioma es mucho más que estar expuesto a él. De nada sirve estar escuchando a alguien hablar, por ejemplo, en inglés, si no contextualizamos ese mensaje. Es importante ayudar al niño a entender lo que estamos diciendo bien sea mediante el juego o el aprendizaje espontáneo a través de la interacción y el intercambio comunicativo.
Ventajas del bilingüismo en bebés
Si has llegado hasta aquí ya te puedes imaginar que una de las principales ventajas del bilingüismo en bebés es el aprendizaje natural de un segundo idioma. Pero hay más:
- Los niños tienen capacidad de comunicarse con personas de otros países en cuanto aprender a hablar.
- Favorece la capacidad de concentración.
- Hablar dos lenguas en el día a día es un estimulante para el cerebro y un buen entrenamiento para la memoria.
- Facilita al niño el aprendizaje de más idiomas
- Cuando el niño sea mayor tendrá mayor facilidad a la hora de introducirse en el mercado laboral, tanto de nuestro país como fuera de nuestras fronteras.
¿Quieres conocer el proyecto bilingüe de nuestra escuela infantil? Contacta con nosotros y te ampliaremos la información. ¡Estaremos encantados de resolver todas tus dudas!